Cool it: desmitificando el dogma verde

Calentamiento global. Todos hemos escuchado sobre calentamiento global. Todos hemos escuchado sobre como el mundo se está acabando, los pinguinos se estan muriendo y los bosques ya no reverdecen. Todos sabemos que lo que está causando este holocausto ambiental es la contaminación, los autos, el plástico y las malas vibras. Todos sabemos (o creemos saber) la solución a todo esto: andar en bici, cambiar los focos, lavar en el rio, abrazar un arbol y adoptar un panda. Pero, ¿es esto verdad?.

Digo, desde que Al Gore lanzó Una verdad incómoda y todo el trabajo entorno a esta conferencia, no he escuchado ni una sola crítica o cuestionamiento. Quiero decir, un cuestionamiento inteligente, porque los que Al Gore ha presentado como sus detractores tienen argumentos del medioevo. No, no me refiero a eso. Quiero decir, no he escuchado una crítica bien fundamentada (y pensada) hacia la histeria ambiental que se ha venido gestando. Y es que yo siempre he pensado que lo que se enseña como solución para los problemas ambientales no son más que parches pequeñísimos y que desvían la atención del verdadero problema. Es como tratar de matar a un elefante a ligazos. Y creo, sobre todo, que mucha gente se reviste con un halo de conciencia verde para sentirse mejor consigo misma que por un verdadero interés en hacer un cambio. No he visto que la gente se interese mucho en investigar cuál es el verdadero cambio que debe hacerse. Solo aceptan el dogma verde como se les ha enseñado.

Es por esto que el documental Cool it del director Ondi Timoner me llama tanto la atención y me entusiasma. He aquí una breve sinopsis:

¿Catastrofe climatica? ¿Fin de la civilización como la conocemos? Cool It está basada en el libro homónimo y las conferencias de Bjorn Lomborg, el controvertido autor de The Skeptical Environmentalist. El galardonado cineasta Ondi Timoner viaja por el mundo con Lomborg explorando los hechos reales y la verdadera ciencia del calentamiento global y su impacto. Lomborg es el fundador y director del Copenhagen Consensus Center, un grupo de expertos respetados mundialmente que reune a los mejores economistas para priorizar los mayores problemas globales (entre los que se encuentran la malaria, la falta de agua potable y el SIDA) basado en un analisis costo/beneficio de las soluciones disponibles. Entre las fuertes y polarizadas opiniones en el debate sobre el calentamiento global, Cool It sigue a Lomborg en su misión de llevar las soluciones mas inteligentes al cambio climatico, la contaminación ambiental, y otros problemas en el mundo.

La verdad es que el documental superó mis expectativas  Lomborg me aclaró varias ideas y confirmó otras que yo tenía. La propuesta de Lobmorg sobre el problema ambiental y sus soluciones es la más clara, estructurada y coherente que he visto. Sobre todo, me gustó ver como aplicó principios de la economía (como la eficiencia y el análisis costo/beneficio) para evaluar las propuestas que se han dado en torno a este tema.

En principio, Lomborg (al contrario de lo que muchos piensan) no niega ni minimiza el cambio climatico y el calentamiento global. Por el contrario, trata de encontrar la información más verídica y coherente sobre este fenómeno. Separa a la propaganda, la moda y el sentimentalismo que ha distorsionado al análisis del calentamiento global de los datos científicos. Lomborg expone que muchos de los datos presentados en Una verdad incomoda fueron datos alterados o mal presentados. Por ejemplo, el huracán Katrina tuvo un efecto tan devastador en Nuva Orleans no porque el calentamiento global esté haciendo huracanes cada vez más fuertes, sino porque Nueva Orleans tenía fallas de ingeniería y de protección civil graves.

Las soluciones que se promueven como la panacea de la salvación ambiental (que han surgido por el miedo y las modas, más que por el análisis) tienen un efecto pequeñísimo y de alto costo. Por ejemplo, se expone que si todos los carros del mundo se cambiaran por carros híbridos, sólo se lograría disminuir el .5% de la contaminación necesaria para disminuir el cambio climático. Las soluciones que han propuesto los gobiernos tampoco son una solución eficiente; si todos los países del mundo implementaran el protocolo de Kyoto, al final del siglo sólo se reduciría la temperatura en medio grado Fahrenheit, y estaríamos salvando solamente a un oso polar al año.

¿Se trata, entonces, de dale vuelo a la hilacha porque no hay nada que podamos hacer? No, todo lo contraría, hay mucho que se puede hacer y debe hacerse. El problema ha sido cómo la sociedad y los gobiernos han tratado de combatir el calentamiento global. La clave está en el desarrollo de fuentes de énergía sustentables que sean económicamente competitivas ante el carbón. Aunque los países desarrollados gasten una fortuna en fuentes de energía ecológicas, los países en desarrollo tienen otras prioridades; no pueden destinar tantos recursos en tener fuentes de energía sustentables (de ahí la importancia de que estas fuentes bajan de precio). Y es que es muy cierto; en países como China e India la gente tiene como prioridad sacar a sus familias adelante, tener la posibilidad de ir a la escuela. En África la gente lucha por tener servicios médicos y hogares decentes, en tener fuentes de energía sin importar que éstas sean altamente contaminantes.

Es por ello que la manera más inteligente de combatir el calentamiento global y protejer el medio ambiente está en invertir en investigación y desarrollo tecnologico para lograr que la humanidad pueda tener todos los beneficios de la modernidad sin el deterioro ambiental que lo ha acompañado. La respuesta no está en soluciones románticas (el romanticismo es creer que los tiempos pasados fueron mejores que el presente); no se trata de encontrar la solución en el pasado, lavando en el rio y montando a caballo. La solución está en el futuro. En que ese futuro pueda ser accesible a todos. Lomborg presenta un presupuesto de 250 mil millones de dólares (lo que EU destinaría para cumplir con el protocolo de Kyoto) que se distribuye en investigación científicia, salud y educación. Si no se resuelven los problemas básicos de salud y educación en los paises en desarrollo, es muy improbable que éstos se sumen a la lucha contra el cambio climático.

¿Que queda entonces por hacer para nosotros, simples mortales que no podemos manipular los presupuestos del Estado? Hay mucho por hacer. Gracias a dios (y a Twitter) la tecnología nos ha dado herramientas muy poderosas para que la gente gestione el cambio. La gente tiene que abandonar las supuestas soluciones ineficientes para combatir el problema y centrar su atención en exigirle a los gobiernos que inviertan en soluciones eficientes. Se debería exigir que aumente el presupuesto en investigación y desarrollo tecnológico en materia de fuentes de energía. En México, el presupuesto para este rubro es casi nulo y nadie dice nada al respecto.

La cosa es, entonces, ser más racionales y no dejarse llevar por discursos fáciles y digeribles. Ni por soluciones que parecen ser soluciones pero no lo son.
Les recomiendo ampliamente la película, desde su página hay varias maneras de conseguirla (incluso por itunes).

Por: Ramón Gallegos

Twitter: @RamonGallegos_

Una respuesta a “Cool it: desmitificando el dogma verde

  1. Muy interesante lo que comentas, aunque no he visto el documental. He estado es un par de conferencias sobre el medio ambiente, y he logrado concluir es que uno de los grandes problemas que afectan el medio ambiente es la pobreza. Y es algo que en muchos medios de comunicación (en México), cuando hacen notas del calentamiento global, no lo comentan ni cuestionan. La pobreza afecta, como dices, la pobreza hace que otras cosas sean prioridades. Hay que ver el tema de diferentes perspectivas (como lo mencionas con el huracán de Nueva Orleans).

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